Preparando las rutas: anécdotas



Para poder documentar con fotos las rutas y comprobar que mis recuerdos no me fallan estoy poco a poco comprobando in situ los lugares sobre los que hablo en la recopilación de rutas que estoy preparando. A veces las cosas que busco ya no existen, otras es complicado localizarlas porque literalmente han sido devoradas por la vegetación  y en algunas, los recuerdos de la memoria no eran tan exactos como pensaba.

Todas las anécdotas y contratiempos no pueden aparecer en el recopilatorio pero afortunadamente este blog me deja espacio para ello.


Día 26 de junio de 2015

Hoy salgo con mi nieta Lucía y mi hija Juani para fotografiar algunos rincones de la zona de El Corral de Tadeo, L'Aigüeta de Silvio, la pista forestal de la Penya Tallà y Del Destallador, recorrido que hacemos en coche.


Tomando notas en la planicie de la Casa Forestal

Uno de los puntos de parada es El Cantal Gitat. Hoy en día casi nadie lo conoce, además es complicado encontrarlo porque los pinos lo han dejado totalmente oculto y la senda que pasaba por debajo prácticamente ha desaparecido. Cuando yo era un adolescente, esta piedra era visible en la distancia y servía como punto de referencia a las personas. Para los cazadores era un lugar estratégico ya que los conejos buscaban refugio en ella.

Pinada del Cantal Gitat


Después de visitar otros puntos nos acercamos al Rebolcador. La imagen actual no permite intuir como era este espacio cuando era usado, como su nombre indica, como zona de descanso de los burros o mulas que utilizaban los leñadores. Antes era un espacio abierto sin árboles, no como en la actualidad.
El Rebolcador

Cruzamos esta hondonada para subir dirección a la senda de Puerto de Sax, pese a las protestas de Lucia, a la que le duelen ya los pies.

Cruzando el rebolcador para ir a la senda del Puerto de Sax


La senda de que buscamos, por desuso, la vegetación y los desprendimientos de las piedras que provocan las lluvias, es difícil de localizar si no se ha conocido antes. Para la gente de hoy en día debe resultar incomprensible que antiguamente la gente utilizara esta vías para ir de una población a otra pero su uso no se remonta a tantos años, sólo que en el último siglo todo ha cambiado muy rápido. 
Aunque nos resulta un poco difícil buscar un buen ángulo, hacemos unas pocas fotos.

Inicio de la senda del Puerto de Sax


Cogemos nuevamente el coche para bajar por la pista del Destallador.

Camí del Destallador



Unas últimas fotos de la fuente del Xop. Una nube de moscardas que se refugia en la sombra y la presencia de algunas arañas sobre la pared del nacimiento provocan la estampida de Lucía.
Paredes de la fuente del Chopo


Volvemos al coche y regresamos a casa cogiendo el camino que va paralelo a la carretera de Castalla-Sax,


Día 27 de junio de 2015

Hoy salimos sólo Juani y yo porque Lucía parece que "sigue cansada". Nos dirigimos por la carretera del puerto, dirección Sax para recorrer algunos sitios en la cara posterior de la Penya Tallà, a la Solana Marrassà.

En primer lugar nos dirigimos a la Casa Campana a la que el trazado de la antigua carretera  Sax-Castalla y la actual autovía (que discurre paralela), han dejado "atrapada". Dejamos el coche en el arcén y después de comprobar que no hay acceso desde este punto a la finca, optamos por deslizarnos por el ribazo más accesible, a la altura de la balsa, con tal mala suerte que Juani lo hace por un punto en el que hay un avispero y le pican en el codo.

Cuando nos aproximamos a la casa nos damos cuenta de que hay un coche aparcado y que se sigue usando como vivienda. En la puerta principal hay varias cámaras de seguridad.

Casa de la Campana

Casa de la Campana


Para no tener problemas, decido pedir permiso para tomar unas fotos en el exterior pero a la llamada del timbre no nos abre nadie. Insisto dando golpes en la puerta y oímos una voz que desde dentro nos avisa de que está en la ducha y no puede abrir. Esperamos un buen rato pero como mi hija ya ha hecho varias fotos, incluida la ermita, decidimos regresar al coche. Cerca ya al coche vemos a lo lejos que un hombre sale de la casa y nos busca en el sentido opuesto al nuestro, pero estamos ya demasiado lejos para avisarle, por lo que continuamos nuestra ruta.

Nos desviamos a la altura de la pista que baja del Destallador para ir primero para hacer unas fotos de la Font de Bellot y después tomar el camino que desde la parte baja de la pista nos lleva por nuestra izquierda, a las faldas de la Solana Marrassà.



Aparcamos para seguir la ruta a pie.

Solana Marrassà


Antes había un senda que siguiendo el margen de este bancal subía hacia el macizo. El arado de la tierra ha hecho que desaparezca pero siguiendo su trazado ascendemos hasta llegar a la parte de montaña.

Subida a la Solana Marrassà


Finalmente llegamos a un senda que transversalmente cruza este macizo, justo en el momento en que un ciclista de mountain bike está pasando por ella, que asombrado apenas puede contestar a nuestro "buenas tardes".

Cogemos la senda en dirección Villena, es decir, a nuestra izquierda, que va bordeando a el macizo hasta llegar a un claro en el que encontramos nuestros objetivos: El Clot d'Isaac y el Mas de Port de Sax.

Aunque en el Clot no hay ya agua me asombra comprobar que  sigue estando el cañaveral y que el que yo conocí como un pequeño arbusto a la vera del mismo, sigue estando y tiene un considerable tamaño.

El Clot d'Isaac

Vistas del Cabeços dels Portuguesos


Tomamos algunas fotos más de distintos puntos que quedan a nuestra vista desde el camino. Cuando le explico a mi hija que hasta este punto es posible llegar en coche, creo que me mira "con recelo" pensando en la caminata que acabamos de hacer. Pero la ruta no es comparable de hacerla por senda que en coche. Lo que importa no es el destino sino lo que se disfruta en el trayecto para alcanzarlo.


Por la senda de la Solana Marrassà

Tomamos el camino de regreso, por el mismo que hemos venido y en esos momentos el sol ya empieza a estar bajo. Como vamos hablando todo el tiempo, nos despistamos y nos pasamos de largo la salida que tenemos que coger para volver al bancal.

Ya no tenemos muy claro dónde estamos y tiramos mano de las fotos de hemos tomado de la Solana desde el bancal y también nos aseguramos si hay huellas nuestras en sentido contrario por la senda que transitamos.

Afortunadamente encontramos el sendero perdido justo en el momento en que ya la luz del día es muy escasa. Montamos en el coche y volvemos a casa.


Día 28 de junio de 2015

La salida de hoy la hacemos en 4x4 ya que los lugares que vamos a visitar son de difícil acceso. Subieremos por detrás a la Penya Tallà y luego iremos hasta la Font de Joan, el Contador y el Cantal d'Arnau. Me acompañan mi hijo David, su hijo (y mi nieto) Aarón de sólo 3 años y mi hija Juani.

Vistas del pueblo desde la Sierra del Fraile


Primero nos acercamos al Parat de les Foietes para tomar fotos tanto de la balsa como del antiguo corral, que durante un tiempo pertenció a la Sociedad de Cazadores. 


Por la senda hacia el Corral del les Foietes

Balsa de Les Foietes



En la parte de atrás todavía forma parte de una valla exterior la estructura del escaparate de la tienda que teníamos (Armería y Papelería Gimeno).



Escaparate de Armería Gimeno



Volvemos hasta donde hemos dejado el coche para tomar fotos del Corral del Frare y alrededores. Montamos nuevamente en el coche para dirigirnos a la parte mas alta de la Penya Talla en coche, por una senda que incluso para un 4 x4 es complicada y que antiguamente sólo se hacia con mulos,  burras o andando.


Camino de subida a la Penya Tallà

Mientras yo espero con Aaron, mis hijos se acercan hasta el cortado que da nombre a la peña, para tomar algunas vistas desde allí.


Vértice geodésico de la Peña Tallà

Vistas desde la Penya Tallà


Nos dirigimos ahora con el coche a un punto próximo al barranco en el que está la Font de Joan. El descenso al barranco lo hacemos Juani y yo, mientras que David y Aarón se dirigen con el coche al punto del camino de la Penya Tallà que se encuentra próximo a la Senda del Contador, para esperarnos. Mi intención es, una vez llegados a la Font de Joan, seguir la senda que discurre por el barranco para ascender más adelante hasta llegar al punto en el que nos espera el coche. 

El descenso hasta la fuente no es fácil porque está muy empinado y la piedra está muy suelta por lo que es muy fácil resbalar, lo que nos obliga a hacer el trayecto muy lentamente. Además ya se empiezan a notar los efectos de la ola de calor que para ese día está prevista.

Tomamos las fotos de la fuente y nos adentramos en la senda. Al principio el trayecto es agradable ya que lo hacemos entre sombras,  Pero a partir de un determinado punto, la vegetación empieza a escasear.
Senda del Barranco de la Font de Joan

Senda del Barranco de la Font de Joan


En un punto en el que aparentemente la senda se bifurca, optamos por seguir la de la izquierda ya que la de la derecha según la señalización nos llevaría a la Cova Roja. 

Después de una buena caminata al sol nos damos cuenta que la senda "se diluye" entre los matojos y ya no lleva a ninguna parte. Probablemente hemos estado siguiendo una senda hecha por los jabalíes.

Pensamos en volver hasta la bifurcación para dirigirnos a la Cova Roja pero no conseguimos llamar a mi hijo para avisarle ya que en esta zona no hay cobertura para los teléfonos móviles. Finalmente decidimos arriesgarnos y buscar el camino del Reconco atravesando el cerro.

Laderas del barranco

Nos fijamos como meta un pino que se veía en el alto al que llegamos con mucha dificultad por ser el terreno de piedra suelta y por el calor que además comenzaba a ser insoportable. Además, poco previsores, sólo llevábamos una poca agua en una botella de horchata reutilizada, que ha esas alturas estaba además caliente como la sopa. Cuando por fin llegamos al árbol descubrimos que detrás había otro cerro desde el que no se veía el coche ni mucho menos el camino.

Con mucho cuidado, a veces dejándonos deslizar por los matojos y las rocas conseguimos descender por la otra ladera para remontar la siguiente. Aunque teníamos claro que la dirección era correcta desconocíamos la distancia que nos separaba de nuestro destino.

Cuando ya estábamos empezando a acusar el agotamiento llegamos a un punto en el que se divisaba a lo lejos el coche, lo que nos animó a seguir. Afortunadamente en este punto también encontramos el abrigo de la sombra de un pequeño pino y nos tomamos un respiro. En esta ocasión mi memoria me había jugado una mala pasada ya que la senda que yo recordaba transcurre por la parte alta del macizo y no por el fondo del barranco.

Cuando llegamos al coche, descansamos un rato a la sombra y nos comimos algo de fruta para reponernos del esfuerzo. Como estábamos justo al lado del Contador, Juani se acercó a pie para tomar alguna foto más.

Senda que va al Contador

De camino a casa nos desviamos con el coche para tomar las últimas fotos en la zona del Cantal d'Arnau, desde donde se ve la senda por la que mi padre iba todos los días andando al Convento de los Franciscanos cuando era niño desde la Casa de Santa Aurelia.


Contemplando las vistas desde l'Alta de les Voltes


Después de esta ruta acordamos revisar bien los trayectos antes de salir y proveernos de una buena cantimplora de agua  y así evitar los daños colaterales por mala planificación:

Las zapatillas de mi hija después de esta excursión





Día 19 de septiembre de 2015

Después de pasados los calores del verano retomamos las salidas. Hoy iremos hasta la Cova Negra, ubicada en el monte de Fontanelles.

Únicamente vamos mi hija Juani y yo y por lo visto no le expliqué bien el trayecto que íbamos a recorrer ya que en lugar de botas o zapatillas viene con unas sandalias de verano poco apropiadas para las sendas de montaña.

Comenzamos el trayecto bajando por lo que era una estrecha rambla ubicada en la parte posterior de la Casa de los Pasos, hoy casa de turismo rural. Me asombra ver el mal estado en que se encuentra ya que apenas se adivina que era una rambla. Entre piedras y basura descendemos por ella ya que queremos tomar sólo la foto del antiguo almacén para enterrar la morca (residuos de la elaboración de la oliva que son tóxicos) que, aunque tapiado, todavía se conserva en la parte alta. Esta pequeña rambla desembocaba en la principal que discurre más abajo y en la que vamos a hacer parte del recorrido.



Casa Los Pasos



El punto en el que empieza la vegetación al fondo del barranco hacemos algunas fotos a la Fonteta del Gorg, con ciertas dificultades porque la lluvia caída durante los días anteriores lo ha dejado todo embarrado.
Desde la fuente cogemos ya la senda que asciende y que nos llevará hasta el Terrer de Sirera, el que fuera un buen amigo mío y que ya hace muchos años que falleció. Hoy su finca está abandonada y en un estado lamentable. El vallado de la finca no nos permite tomar fotos de cerca.

Ascendemos la ladera del Avemaría porque acortamos distancia para retomar la senda que nos llevará a la Cova Negra aunque no es la más apropiada para ir con sandalias.
He escogido esta senda porque es la que discurre por la parte más alta del monte de Fontanelles y pasa muy próxima a la peña El Canto el Gallo, en lo alto del macizo, pero la vegetación ya apenas permite verla por lo que en la actualidad no puede ser utilizada como punto de referencia.


El Canto el Gallo al fondo de la pinada

Mientras andamos descubrimos que esta senda va a ser parte de la Marcha BTT Serra de Biar que va a tener lugar mañana ya que cada poco encontramos señales y avisos para los ciclistas.

Vistas del pueblo desde la senda de la Cova Negra




A la altura del Barranc dels Vivers la senda se bifurca. Pensando que la de la izquierda lleva a la Peña Parroc tomamos la otra pero cuando nos queremos dar cuenta estamos ya dejando atrás la Cova Negra. 

Cova Negra

Nuestro camino llega a la pista forestal, pasando por los embalses que se han construido para proveer a los helicópteros en caso de incendio. Decidimos que en otra ocasión vendremos en coche por dicha pista para tomar las fotos de la cueva.
Cuando bajamos por ella nos encontramos con unos senderistas vestidos con ropa deportiva en colores chillones, supongo que asombrados de ver aparecer a dos personas con un atuendo poco profesional.
Tomamos el camino de regreso al pueblo. Una vez pasada la casa de Campaneta descubrimos un sapo aplastado por los coches y carbonizada por el sol:


Sapo

Como se nos ha hecho tarde y todavía estamos un poco lejos, estamos atentos a los coches que bajan por la pista. Finalmente paramos a un par de coches de unos familiares que van camino del pueblo. Nos montamos en uno de ellos mientras le contamos durante el camino, todas nuestras andanzas.


Día 2 de octubre de 2015

Hoy vamos a tomar algunas fotografías en zonas poco accesibles así que vamos en el todoterreno mi hijo David, mi hija Juani y yo.

Por el camino de Fontalbres

Cogemos la carretera del puerto para desviarnos a la altura del camino del Reconco. Vemos que las lluvias de esta semana han hecho que la Fonteta de Soriano tenga agua así que de pasada, desde dentro del coche, tomamos un par de fotos.


Chorret de Soriano

Seguimos ascendiendo y vemos que suben algunos coches, suponemos que para buscar robellones. 

El ascenso por los caminos es complicado incluso con un coche como el que llevamos. Nuestro primero destino es la Coveta Foradada en la que en estos momentos hay mucha agua embalsada en su interior de las lluvias caídas a lo largo de la semana. 

Coveta Foradada

Desde este punto hay unas vistas del pueblo que merecen otra fotografía.

Vistas del pueblo desde la Coveta Foradada


Nuevamente nos ponemos en camino dirigiéndonos hacia el corta fuegos que cruza la Lloma Rasa. Hacemos una parada antes, cerca de un punto donde vemos coches aparcados y gente buscando entre los matorrales. Mientras nos tomamos el almuerzo buscamos nosotros también por si hay suerte y encontramos algún robellón.

Un descanso cerca de la Coveta Foradada


Cuando ya nos vamos a marchar de vacío David encuentra el primero casi al lado del mismo coche. Animados por este descubrimiento volvemos a barrer el mismo sitio, por el que ya hemos pasado antes y esta vez con más suerte o mejor vista encontramos los suficientes para hacernos una picaeta

Primeros robllones de la temporada
Buscando robellones


Pinos en zona replantada

Para la picaeta


De ahí cogemos el coche nuevamente para ir a la pista forestal ya que desde allí desciende el barranco en el que está el Forat Verd. Aunque hay una senda que desde la pista forestal conduce directamente a él, les indico que bajen desde el punto en el que estamos ya que forzosamente deben llegar hasta allí.

Como ninguno de los dos tiene claro que es lo que buscan, después de descender casi hasta la mitad del barranco, punto en el que éste se abre y pierde profundidad deciden remontar nuevamente pensando que lo han pasado de largo.

Por si acaso, toman fotos de cualquier rincón  del barranco que rompe la monotonía del paisaje pero ninguno es el Forat Verd.

Barranco en el que está el Forad Verd


Cuando regresan al coche empiezan a preocuparse porque no me encuentran y deciden ir a buscarme en dirección  a la Lloma Rasa pero yo en realidad me he ido en dirección contrario, a charlar con las personas que buscan setas. Me encuentro con gente de Villena y también del pueblo. 

De vuelta al coche

Cuando regreso al coche, después de una pequeña bronca por parte de mis hijos, reemprendemos la marcha. En esos momentos empieza a lloviznar, no lo suficiente para interrumpir nuestra marcha. Mi idea era volver por el mismo sitio que hemos venido para acercarnos hasta el nacimiento de agua de la Casa de l'Altet pero mi hijo decide moverse por el tramo de la pista que discurre por la cima después de convencerle de que bajar por el cortafuegos no es buena idea, porque varios coches que lo han intentado han perdido el control ya que el suelo cede en algunos tramos.

El camino que hemos escogido al principio tampoco es bueno ya que las peñas han quedado al aire y hay muchos desniveles. Durante el descenso va mejorando el estado ya que todavía conserva tierra el suelo. Aun así nos llevamos algún susto como cuando pisamos de bajada un saliente que nos levanta un palmo del asiento o como cuando cruzamos lo que pensábamos que era un simple charco, pero cuya profundidad hizo que el coche se quedara atrapado.


El camino de la Casa de l'Altet

Cuando llegamos a la finca de la Casa de l'Altet vemos que el camino está cerrado con un cadena así que como antes, yo me quedo en el coche mientras se acercan a pie ellos para tomar unas fotos. David se aventura un poco más lejos pensando que puede encontrar en esta zona algún robellón más pero solo encuentra uno.

Tomamos ya el camino de regreso a Biar y cuando estamos llegando a la Fonsanta, casa en la que nací, y decidimos parar a tomar una foto ya que también la menciono en alguna de las rutas. Como vemos las puertas abiertas me acerco a la casa a saludar a los propietarios. La casa no es la misma construcción en la que yo viví, antes tenía dos plantas y era más grande. La familia hace muchos años decidió echarla abajo y construirla nuevamente para que fuera más funcional. La parte en la que estaba la habitación de mis padres, en la que nací, ahora forma parte del jardín anexo al porche.



Aspecto actual de la entrada de la Casa de la Fontsanta


Después de llamar a la puerta aparece una de las nietas de los amos, la Fatora, con la que solía jugar de pequeño, ya que tiene más o menos mi edad. Después de una agradable charla en la que recordamos cosas de aquellos tiempos, tomamos las fotos que necesitamos, volvemos a casa a dar cuenta del "botín".


Día 17 de octubre de 2015

Hoy vamos a hacer la ruta de los molinos y en esta ocasión sólo me acompaña Juani. Salimos en coche y lo aparcamos en la parte de atrás del Chalet de Ventura. A partir de ahí cogemos la senda que va pegada a la antigua acequia aunque a ratos nos toca ir por la propia acequia ya que la senda se ha desmoronado. 

De camino a la rambla

Por esta senda vemos los dos primeros molinos: el de la Bassa Nova y el de Comaro. Descubrimos que dentro de la Bassa Nova se han habilitado una especie de cuadras para caballos.

Cuando la senda pasa por debajo de la Fonsanta localizo el punto en el que hubo un lavadero para la servidumbre de la casa y al que mi madre, con el resto de mujeres que allí trabajaban, bajaba a lavar la ropa.

Lavadero Casa de la Fonsanta


Volvemos al coche y por carretera nos acercamos al Molino que yo conozco como de Don Joaquín pero que en los registros aparece como del Sequillero o de l'Almoina. Sobre la carretera una nueva víctima del tráfico, otro sapo "camuflado" ya con el asfalto.


Sapo



Un poco más arriba busco el arenero al que mi hermana Milagros iba a buscar tierra para fregar los platos. Cuesta un poco de encontrar porque sobre la cavidad se ha ido depositando la tierra de un bancal superior e incluso ha nacido en medio del montón una olivera.

Concavidad arena de fregar


Aun así conseguimos sacar algunas fotos y reemprendemos la marcha hasta el desvío que tiene la pista forestal justo antes de subir la loma sobre la que está la casa Campeneta. Decidimos dejar en este recodo el coche por si las lluvias han estropeado mucho el camino.
Tomamos fotos de varias entradas al minado de agua que baja por ese barranco desde el Alt de l'Aigua y del Molino de la Mescla.

Entrada al minado de agua de Sant Pere

Una pareja de Villena recoge hierbas y me entretengo hablando con ellos mientras Juani toma fotos. Buscan sajolida para aliñar olivas y hablamos de las distintas maneras que cada uno usa para prepararlas.

Seguimos el ascenso del camino y en este tramo nos encontramos a muchos motoristas, ciclistas, y senderistas, entre estos últimos al sobrino de mi mujer Geromo Colomina y su mujer Tere.

Subiendo hacia L'Alt de l'Aigua

Subimos después al minado principal. En este tramo del barranco sacamos fotos de las rocas de los lados ya que presentan un configuración distinta a la del entorno, en un lado formando un cortado que vierte las aguas que recoge montaña arriba y en el otro un agujero o cau donde se solían esconder los conejos.

A la captura de una foto



Formaciones rocosas en l'Alt de l'Aigua

Formaciones rocosas en l'Alt de l'Aigua


Buscando la carbonera
Formaciones rocosas en l'Alt de l'Aigua
En la planicie que hay entre la entrada al minado y el parat que hace pocos se construyó en este barranco, existía antiguamente una carbonera. Encontramos los restos de lo que debió ser o bien el refugio de los carboneros o la base que en algunas ocasiones se preparaba para apilar la leña, dispuesta en círculo.


Restos de la antigua carbonera


Ejemplo de típico refugio para carboneros

Ejemplo de refugio de carboneros y plataforma para levantar el horno


Las fotos de las carboneras las hemos sacado de este blog: mestelrich2.blogspot.com.es/2011/12/els-carboners-de-la-serra-de-tramuntana.html


Una vez hemos tomado todas las fotos que necesitamos volvemos al coche para regresar a casa.

Día 31 de octubre de 2015

Hoy salimos para tomar algunas fotos de la zona de el Aler y Fontanelles. En esta ocasión salgo otra vez con Juani.

En primer lugar nos dirigimos a la zona del Aler que se conoce como el terremoto. Aunque desconozco cuando se produjo debió ser hace muchísimo tiempo porque yo he conocido esta zona siempre con este nombre. Aunque el paso del tiempo ha hecho que las tierras que el seísmo desplazó de la zona de la montaña hacia abajo estén totalmente integradas en la zona boscosa y de cultivo, todavía se pueden encontrar grandes grietas en el terreno y si se presta atención, se distingue desde abajo el punto en que la tierra se desgajó del macizó. La senda pasa justo por encima de ese punto.

Tierras desplazadas por el terremoto



Grietas ocasionadas por el terremoto


Llegamos hasta la Caseta de Sirera, aunque en algún mapa la hemos visto con el nombre de la Casa Terremoto. Perteneció a un buen amigo mío aunque ahora la casa ha sido ampliada y mejorada.

Casa de Sirera

Con el coche nos dirgimos por la carretera que va a Bañeres al camino que nos aproxima a l'Agüeta de Punxò, manantial que hoy en día está seco y además, oculto por una abundante maleza.
Bancal en el que estaba el manantial

Aigüeta de Punxó
Reemprendemos la marcha para ir a la Casa de Menea accediendo por el siguiente camino que a mano derecha encontramos en la carretera. En mi familia esta casa es conocida como la del Tío Tàbol, uno de mis cunyados, cuya familia es propietaria de la caseta. Muchos veranos veníamos a pasar el día y darnos un baño en la balsa. Lo primero que me sorprende es como ha cambiado la zona ya que se han construido más casas y mejorado los accesos. En el punto del camino que debemos tomar la senda que conduce a la casa Menea encontramos una finca vallada en la que se ha edificado un chalet enorme que rompe con la belleza del paisaje. La senda discurría por enmedio de la finca y ha sido desviada forzosamente bordeando el vallado de la finca.


Bordeando la finca por la que pasaba la senda

Llegamos por fin a la casa y tomamos algunas fotos. De la fuente de la balsa manaba aguá fresquísima y abundante. Aquí colocábamos los botijos con "palometa" y las sandías para refrescarlas

Balsa de Menea






Caseta de Menea (para nosotros la del Tio Tàbol)

La balsa es tan profunda que cuando estaba llena del todo únicamente se podía bañer el que sabía nadar.

Bordeando de nuevo "la mansión" regresamos el coche en busca del siguiente destino: la Casa Nova. 




Casa Nova

Volvemos al coche y a la carretera para ir hacia el Corral del Banyerut y el Chalet de Briones. El camino no está en muy buen estado como consecuencia de las lluvías.

En dirección al Corral del Banyerut

Cueva en la finca del Corral del Banyerut


El coche tenemos que dejarlo en recodo del camino ya que nos ha patinado en un tramo y no podemos aproximarmos al Barranc del Banyerut en el que está el Morter, concavidad que se utilizó para la fabricación de pólvora. Descendemos el barranco y nos cuesta bastante encontrarlo ya que la vegetación y los troncos secos caídos dentro del barranco nos dificultan su localizació.

Barranco en el que está el mortero de pólvora

Una vez logrado nuestro objetivo, nos dirigimos hacia la Casa Marco, propiedad de un amigo. Como la finca está cerrada tomamos algunas fotos desde la valla y partimos hacía nuestro último destino.



Casa Marco

Cogemos el camino de Patirás, que al igual que el anterior, está en un estado lamentable.

Balsa de Patiràs

Granja de Patiràs


Tomamos las últimas fotos y pensando que estará en mejor estado, cogemos el camino que yendo direccción a Bañeres, nos volverá a sacar a la carretera principal. Para nuestra sorpresa, el camino está aun peor así que las alternativas son seguir hasta Bañeres o intentar dar la vuelta, cosa que hacemos a la primera oportunidad que tenemos.

Día 29 de noviembre

Aprovechando que ha salido un día estupendo para las fechas que estamos y hacemos una salida para tomar algunas fotos adicionales y enseñarle a mi hija algunos rincones que estas semanas pasadas he visitado con Juanjo, el de la Maredeu, que me ha llevado con su 4x4 a mostrarme algunos rincones que yo no conocía personalmente.

Camino de subida a la Tosquera

En primer lugar vamos a la Tosquera. Tomamos algunas fotos del pozo de nieve que queda de los dos que existían en esta finca. Desgraciadamente es el de menor tamaño. Durante algún tiempo fue usado como aljibe por lo que cuenta con construcciones posteriores que canalizaban el agua.

Punto en el que estaba la puerta de acceso al pozo

Parte superior del pozo
Canalización para llevar el agua de lluvia hasta el pozo
El otro era el más grade de los existentes en Biar y sus propietarios decidieron derruirlo y terraplenar el bancal sobre el que estaba. Aunque en los libros pone que desapareció en los años 40 no es cierto, ya que a principios de los 50 seguía en pie, como bien deben recordar los cazadores que iban por esa zona. En tiempos de guerra se utilizó para guardar muebles viejos. 

Bancal en el que se levantaba el pozo de nieve grande.
En aquel entonces Pepe Ballester, primo hermano de mi padre, trabajaba de mulero en esa finca y nos avisó para que nos lleváramos algunos de esos muebles. Maroma en mano, mi padre y yo nos llevamos unos cuantos. 

Pino piñonero de la Tosquera



Cogemos algunas fotos también del pino piñonero más grande de Biar que está junto a la casa. Mi padre fue el encargado de recoger los piñones y venderlos a cuenta de sus propietarios. Ayudado por una maroma, se encaramaba a las ramas para dejar caer todas las piñas al suelo.


Casa de la Tosquera


Nuestro siguiente destino es la Casa del Bobo donde existe un pozo de nieve que no consta ni en el catálogo de bienes arqueológicos del ayuntamiento ni en el de la Diputación. Como cayó en nuestras manos un libro sobre pozos de nieve en la provincia de Alicante, cuyos autores elaboraron el último catálogo para ese Organismo, nos pusimos en contacto con ellos para darles la información y las fotos del este pozo, que en poco tiempo, formara parte del mismo.
Entrada a la Casa del Bobo

Bancales de la Casa del Bobo

Restos del Pozo de Nieve

Seguimos por el Camino de Fontalbres y nos desviamos por la Casa de Camarasa para ir hasta el Barranc de Garrantxo para tomar fotos de la Coveta Verda, un nacimiento natural en una de sus vertientes, del que todavía brota la suficiente agua como para deslizarse por el barranco y formar un buen barrizal en el que disfrutan revolcándose los jabalíes. 

De camino a la Coveta Verda

Coveta verda

Barrizal a los pies de la Coveta

Huellas de jabalíes

Volvemos al camino para continuar en dirección del Camí de Benassait. Antes hacemos una parada para ver el Pauet de Gilo y el camino de carros que mi padré ayudó a construir, que comunicaba esta zona con el Pinar de Camús, facilitando el transporte de leña con carros.

Camino para carros

Ya en la pista forestal, nos detenemos un momento en Les Casetes de Gil, desde donde nos acercamos andando hasta la calera que tenía mi padre en un barranco próximo.


Zona de recreo de les Casetes de Gil


De camino hacia el barranco de la calera


En la calera.

Cuando regresamos a la pista forestal, en el camino de descenso hacemos una nueva parada para tomar fotos del pequeño acueducto que en el barranco de l'Alt de l'Aigua pasa desapercibido entre los pinos.

Pequeño acueducto de la acequia


Regresamos al pueblo después de una mañana agradable que, a diferencia de rutas anteriores, no ha tenido ningún contratiempo.

Día 1 de diciembre de 2015



Hoy me he aventurado por mi cuenta a buscar la ubicación exacta del Forat Verd, intento que ya hicimos en una salida anterior pero que al final no encontramos. Es un lugar que yo no conozco más que de oídas y que según las indicaciones de mi amigo Pepe Pernales, ya fallecido,  después de la Coveta Foradada, volviendo por el camino que discurre a los pies de la Lloma Rasa, hay dos barrancos y que en el cauce de uno de ellos, está este agujero del que manaba agua. 

He dejado el coche donde comienza el cortafuegos que sube hasta la Lloma Rasa y me adentro ascendiendo por el barranco hasta un poco antes llegar a la altura de la Caseta dels Caçadors. He dejado a mi derecha el barranco pequeño que baja por la zona da la umbría de la loma para coger el siguiente. Son barrancos difíciles de transitar. 

Estado del barranco


Más o menos por la mitad de su cauce encontro los restos de una antigua calera. Cuando he llegado casi al final del mismo encuentro la senda que según Pepe te llevaba hasta el mismo Forat Verd, justo en el lugar en el que colocábamos los monteros para las batidas de jabalíes. 

Tomando la senda llego al final de barranco sin ver nada y, además, en el último tramo el trayecto de la misma se pierde entre la vegetación y desaparece. 

Viendo que en este segundo barranco no hay nada que pueda ser lo que busco me paso al más pequeño, en dirección al cortafuegos. Desplazarme por el mismo era bastante difícil debido a la cantidad de maleza, carrasca y pinos que han crecido en él.



Ascendiendo por el cauce del barranco pequeño
 Finalmente, la búsqueda da sus frutos  y encuentro lo que claramente era el Forat Verd, es decir, un orificio natural entre las peñas. En el pasado, el fluir constante del agua favorecía la aparición de musgos y vegetación cuyo color dieron nombre al nacimiento. En la actualidad todavía crece algo pero el agua, al menos en este momento, no fluye pero puede que en épocas de lluvia fuerte si lo haga.


Forat Verd

Piedras colocadas delante del Forat Verd a modo de pileta
La mejor manera de llegar a este punto hubiera sido bajar por el cortafuegos desde su parte alta hasta más o menos la mitad de la cuesta, en su tramo más empinado. 

Parte alta del barranco. El acceso es mejor si se hace por la pista forestal que discurre por la izquierda por la zona alta y adentrarse por la mitad del barranco.

En este punto debemos desviarnos hacia la derecha en dirección a Levante, hasta llegar justo a la mitad del cauce del barranco.
 

Día 13 de diciembre de 2015

Comenzamos hoy la ruta bien temprano aprovechando "el fresquito de la mañana", diez grados a las 10.00 horas. Salimos Juani y yo en dirección a Patirás, para toma algunas fotos más del Teular que hay un poco más arriba de la Casa de esa partida rural. No hace muchas semanas estuve aquí con Juanjo (el de la Maredeu) que fue quien me dio a conocer este rincón.

Camino de Patirás hacia la montaña

A la altura de la casa nos encontramos con algunos cazadores que van a probar suerte.

Aunque el teular está en estado ruinoso, tomamos fotos del pequeño acueducto que hay en el barranco y del horno, que aunque tiene taponada toda la entrada con piedras y tierra todavía parece que conserva en pie su interior.

Restos del Teular

Boca del horno

Interior del horno

Debatimos durante un rato sobre la finalidad del acueducto. Un miembro de la familia propietaria de terreno me aseguró que servía para canalizar el agua y llevarla hasta la balsa de Patirás. Como no hay a la vista restos de conducciones se empeña en que únicamente se usaba para retener en parte el agua de las lluvias y encauzarla por el centro del barranco. Al final, quedamos en tablas.

Acueducto sobre el barranco

Defendiendo mi teoría


Observamos que en toda la finca se encuentran restos de ladrillos, incluso formando parte de los ribazos de los bancales.

Tejas que salían mal en la cocción reutilizadas en un ribazo

Nos montamos nuevamente en el coche y cambiamos de destino. Ahora nos dirigiremos por una pista forestal que hay pasado el puerto, en dirección a la Caseta de Sixto.

En dirección a la Casa de Sixto


De camino nos encontramos a mi sobrino Silvio, que nos mira muy sorprendido. Escopeta en mano va en busca de una nueva pieza de caza. Después de una breve conversación continuamos. Aparcamos en la pequeña casa que también pertenece a la Casa del Tio Sixto y que era utilizada por la persona que mantenía justo delante de ella un buen número de colmenas.
Caseta de apicultor



Desde aquí, subimos por la ladera hasta encontrar la senda del Alto de la Vueltas, la senda del abuelo David como yo la llamo, y que nos llevará cerca de la Coveta Blanca donde queremos tomar algunas fotos.
La senda está en muy mal estado, a tramos desaparece de nuestra vista y simplemente nos dejamos llevar. Pronto entramos en calor, y no sólo por el sol.


Por la senda del Alto de las Vueltas

Cuando llegamos al nacimiento del barranco bordeamos por la grandes peñas que hay allí. Intentando buscar una buena foto de la cueva, que da justo hacia el otro lado, mi hija se desliza como un gato por los laterales de una de las rocas que parece que tiene acceso a esa parte del barranco.

Rocas contiguas a la Coveta Blanca

Después de bordear unas piedras verticales que parece que amenazan con caer de un momento a otro, consigue su objetivo de llegar a la cueva, mientras yo vigilo desde lo alto.

Conseguido nuestro objetivo, damos la vuelta y regresamos al coche. Descendemos por la pista forestal para llegar al barranco en el que está el pozo de la Casa Mira, de gran profundidad y en el que todavía hay agua.

Tramo de bajada de la pista forestal en dirección a La Argueña

Pozo de la Casa Mira

La última parada del día será tomar una foto del lugar en el que se levantaba la Casa Mira, que mencionamos en alguna de las rutas y que después de la construcción de las distintas carreteras quedaba al otro lado de la autovía. Todavía se puede reconocer el lugar por los caminos que llegaban hasta la casa.

Solar en el que estuvo la Casa Mira
Las siguientes salidas ya las hago por mi cuenta, a puntos de acceso en los que yo, cámara en mano, puedo llegar.

Ahora sólo queda ordenar las palabras y las ideas para que todo este trabajo se vierta en un unas rutas concretas, en las que espero aportar información curiosa e interesante para los ocasionales lectores que lleguen a estas páginas.




Salida del 24 de enero de 2016


Aunque ya están las rutas escritas y "en cola" para ser publicadas en el blog seguimos saliendo a tomar fotos y a enseñar a mis hijos aquellos sitios en los que yo ya las tomé previamente por mi cuenta. Casi que estamos haciendo de esto de las salidas una nueva forma de vida.

Hoy voy con mi hija a la Cova del Bandoler, Antes hemos parado a la altura del puerto a tomar alguna foto adicional del Cabeço del Telèfon, del Pi Solitari y del Corral del Marqués. 

Camino de acceso a la cantera del Puerto

Descubrimos que ahora estas instalaciones ya no son una granja escuela sino que según los letreros que hay en su entrada, es un complejo rural y un nuevo cartel de color bronce indica el restaurante "Los Monteros". Nunca he entendido que no se mantenga el nombre de los lugares, creo que incluso llamarse Restaurante "El Corral del Marqués" le daría un cierto nivel al lugar y ayudaría a mantener el recuerdo de este sitio.

Complejo construido en el antiguo Corral del Marqués

A continuación nos vamos a la Casa de Celemín donde aparco el coche para bajar andando hasta la cueva. La mejor manera de acceder es andando desde el camino unos cuantos metros en sentido descendente por el carril bici, ya que la cueva está muy próxima a la carretera aunque no visible ya que la arena que obstruye la entrada hace que pase desapercibida.

Margen de la carretera en el que está la cueva

Justo cuando mi hija estaba intentando deslizarse por la pequeña entrada de la misma he visto aproximarse andando desde los bancales superiores a mi sobrino nieto Eduardo, nieto de mi hermana Milagros. Para mi sorpresa estaba buscando la Cova del Bandoler, ya que había leído la historia a través de este blog.

Vistas del interior de la cueva desde la boca de entrada

Cuando empecé con esta aventura de contar los lugares que creo que sólo los de mi generación conocen tenía la esperanza de que pudiera despertar el interés de los más jóvenes, que al fin y al cabo son los que a su vez pueden hacerlo llegar a las futuras generaciones, pero creo que hasta esta misma mañana no he pensado realmente que pueda convertirse este deseo en realidad. Hemos hablado de algunos de los otros lugares que se mencionan en las rutas ya publicadas y también de otros que pondremos próximamente.

Como aventurero que es, se ha ofrecido a introducirse por la pequeña boca de la cueva y tomar algunas fotos. 

Interior de la Cova del Bandoler
Parece que no es tan grande como yo la recordaba pero posiblemente porque en las imágenes que yo tengo en mis recuerdos son las de una cueva con una entrada abierta y amplia vistas con los ojos de un niño.

De regreso al coche
Nuevamente hemos cogido el coche porque quiero enseñar a mi hija la Fonteta de Sant Josep, en la zona conocida como la Alquitranera. 

Subiendo a la zona de la alquitranera
Antiguamente había un segundo manantial en esta zona pero cuando las tierras se habilitaron para el cultivo éste se secó.

Bancal ubicado en la zona en la que existía otro manantial

Tomamos algunas fotos de una de las pocas fuentes en la que brota agua todo el año y nos dirigimos hacia el otro lado de la carretera que va de Castalla a Sax en busca de una antigua balsa que recogía los excedentes de esta fuente.



Fonteta de Sant Josep

La antigua balsa ya no existe pero en la pequeña casa construida en el lugar dispone de una doble piscina, que suponemos sigue alimentándose del agua procedente del nacimiento, ya que una pequeña fuente alimenta de forma constante las mismas.

Fuente que alimenta una de las piscinas
 Cogemos nuevamente el coche para dirigirnos ahora hacia la cantera de la Casa les Gerres. Como no hay ningún vigilante que nos impida la entrada, nos dirigimos hacia el rincón en el que están los refugios de piedra de los antiguos canteros. 


Refugio de canteros
Justo cuando estamos haciendo fotos desde su interior nos quedamos sin batería en la cámara. Hacemos unas pocas más con el móvil y decidimos regresar a casa.

Salida del 31 de enero de 2016


Hoy tengo nuevos compañeros de ruta, mi amigo Vicento Guill y su hijo Vicente, quienes van a enseñarme algo que yo todavía no conozco en los montes de Biar pero que ya hace tiempo que les he oído contar. Se trata de unas extrañas cruces que están grabadas en una roca ubicada cerca del camino que sube desde la Font del Xorro y la base del macizo de l'Alt de la Creu. Hace unos 20 años un senderista de Onil se las enseño a Vicente, quien a su vez había recibido la información de un pastor de su localidad.
Roca con grabados de tres cruces
 Como el acceso hasta la roca no es posible hacerlo con un coche normal vamos en el 4x4 de Vicento aunque lo conduce su hijo.

Hago fotos desde todos los ángulos de estas extrañas marcas que tienen aspecto de llevar ahí tanto tiempo como la montaña pero que desconozco lo que representan. 

Una de las cruces grabada en la piedra

La idea es incorporar esta maravilla a la Ruta del Pico de la Gota que pasa justo por delante de ella, aunque tendremos que "investigar" sobre este tipo de grabados para acompañar las fotografías.

A continuación les llevo al Barranc de l' Ametla para enseñarles las calderas de piedra que Juanjo Sanchís me enseñó en aquel lugar y que también tienen aspecto de antiguas y que extrañamente aparecen en un lugar donde aparentemente no hay restos de viviendas aunque sí un abrigo rocoso. 


Dos de las calderas de piedra

Foto:  Vicente Guill

Después les llevo a ver la Coveta Verda, el manantial que hay en el Barranc de Garranxo y que también conozco gracias a Juanjo, incasable buscador de "tesoros" naturales de nuestros montes.

Coveta Verda
Cogemos nuevamente el coche para dirigirnos al Campo de Mirra ya que conocen una piedra con grabados antiguos que queda cerca del cerro del antiguo castillo de ese municipio. A diferencia del de Biar allí es conocido por todo el mundo y el lugar no sólo está protegido con alambrada para protegerla sino que hay paneles informativos sobre ella. Se le conoce con el nombre de Les Graelletes porque alguna de las líneas recuerdan a pequeñas parrillas.

Les Graelletes

Panel informativo
Hacemos algunas fotos de la Ermita de Sant Bartolomé y de los restos del Castillo y regresamos a Biar, con material suficiente para ilustrar una nueva historia de este blog.

Ermita de Sant Bartolome
Ermita de Sant Bartolomé del Campo de Mirra

Placa conmemorativa al Tractad d'Almizra
Restos del Castillo

Restos del Castillo

Salida del 7 de febrero de 2016


En la salida de hoy queremos terminar la ruta del  Cap de l'Aigua ya que solo tomamos fotografías hasta el minado, pero primero llevo a mi hija por el camino de Fontalbres para enseñarles "les creutes" o petroglifos como los llama ella. 

De camino nos encontramos al sobrino de mi mujer, Jeromo Colomina, quien es una gran amante también del senderismo. Nos advierte del viento helado que sopla en algunos rincones y que hace que el día sea desagradable para estar a la intemperie.

Camino hacia la Font del Xorro
Hacemos primero una parada en la Font del Xorro para que ella tome algunas fotos adicionales ya que le parecen insuficientes las que yo tomé por mi cuenta. 

Senda de bajada a la Font del Xorro
Mientras la espero aparca a mi lado Federico el guarda de la Sociedad de Cazadores de Biar. Mientras le explico este proyecto de escribir las rutas que conozco, ya regresa mi hija. 




Camino de subida hacia el cruce del Collado dela Fondoma

Como mi coche no puede acceder hasta la misma roca y Federico lleva esa dirección montamos con él.
Roca con los grabados

Buscando más piedras con cruces

Después de enseñársela nosotros seguimos nuestra marcha regresando al coche.

Camino de regreso al coche
 El siguiente destino es el barranco del Cap de l'Aigua por lo que tomamos el camino que nos lleva desde el de Fontalbres al de Benassait. Nos cruzamos con un grupo numeroso de senderistas a los que el mal tiempo tampoco les ha parado como a nosotros.
Camino que discurre paralelo al Barranc de Fontalbres

Será ella la que baje por uno de los caminos hasta llegar a Els Campanarets y regrese por la otra senda que regresa al mismo camino pero en otro punto más próximo al Camí de Benassait.

Le acompaño un trecho hasta el primer collado y así poder indicarle que loma es la de l'Alt de la Parada.


Punto en el que dejamos el coche para iniciar la marcha
Alt de la Parada



Regresando desde el collado al coche
Para que no se pierda le explico que la senda de regreso está a la altura de un pino "raro", diferente al resto, ya que es un pino rodeno que no es autóctono de Biar y del que yo sólo he conocido dos o tres ejemplares ubicados en sitios diferentes, plantados seguramente por particulares.

Pino rodeno 
También le explico que Els Campaneres son fáciles de localizar ya que son las únicas peñas que encontrará pegadas al camino.

Campanarets
Con el coche me dirijo hasta el punto en el que debe salir pero después de una hora y media larga empiezo a preocuparme. Como no hay cobertura en el móvil no tengo más remedio que lanzarme por la senda barranco abajo para ver si la localizo. Cuando llevo ya un trecho la veo venir de frente y después de un pequeño rapapolvo regresamos al coche.

De regreso al coche por la senda que bordea el Cabecet de la Noguereta
Último tramo de la senda
Por el camino de Benassait regresamos al pueblo y aprovecho el trayecto para comprobar si se ha aprendido ya los lugares que le he ido enseñando en rutas anteriores y parece que sí, que alguno acierta. 

Hacemos algunas paradas para tomar fotos adicionales que necesitaremos para próximas rutas y regresamos a casa.

Salida del 13 de marzo de 2016



Hoy la salida requiere de un coche todo terreno así que mi hijo ha vuelto a ser cómplice de mis aventuras. Viene acompañado de su hijo mayor David, un bresquilles mitad de Biar y mitad de Castalla, y como suele ser habitual, mi hija también viene preparada cámara en mano.

Como hoy hace un buen día no tendremos problema en visitar todos los lugares que he programado. 

En primer lugar vamos al Barranc del Miracle para tomar alguna foto más del la Casa de la Virgen de las Nieves. Intentamos inútilmente buscar los restos de la Ermita que se dice que existió y de la que hoy en día sólo se recuerda su nombre. 
Casa de la Virgen de las Nieves

En busca de la ermita perdida
Nos dirigimos a continuación hacia L'Alt de la Creu y hacemos la que se ha convertido en una parada obligatoria para nosotros. Les enseño Les Creuetes y una vez más nos empeñamos en buscar otras rocas con más grabados. Fantaseamos un rato en la finalidad de estas marcas y sobre las personas que pudieron hacerlas y proseguimos nuevamente la marcha.

Buscando más cruces

La siguiente parada es el Barranc de la Gota para tomar fotos del nacimiento seco que hay junto a las piletas de roca ya que en las anteriores visitas no he conseguido sacarlas nítidas, por lo que tomamos la pista que discurre por el Barranc de l'Ametela, de mayor tamaño, y en el que desemboca.

De camino al Barranc de la Gota
Subiendo por el Barranc de la Gota
Las tres piletas dispuestas en linea en un pequeño tramo de este barranco también nos dan un buen rato de conversación sobre que sentido tiene que un pastor se entretenga tallando piletas para dar de beber más fácilmente el agua al ganado y nos parece un poco absurdo. Nos siguen pareciendo muy misteriosas por su ubicación a mitad de un estrecho barranco lejos de corrales o casas de labranza.



Limpiando las piletas para la foto
 Próxima a las piletas hay como una pequeña balsa de piedras en la que se encharcaba el agua que  desde el fondo. Justo a su lado mi hijo hace años, en una salida de caza, encontró una especie de refugio construido con una loneta y restos que evidenciaban que alguien estaba viviendo en aquel lugar, por lo que dio parte a la Sociedad de Cazadores. Años después aun están los restos de la lona enganchados a una rama.

Antiguo nacimiento en el que se embalsaba el agua. 
Recogemos algunas piedras con fósiles y volvemos al coche rumbo a nuestro nuevo destino: el Barranc Diago. Como está en el camino de Benassait seguimos por la misma pista ya que a partir de un determinado momento hace un giro de 90 grados para incorporarse finalmente al mismo.

Añadir leyenda

En esos momentos cambió de opinión y le pido a mi hijo que se dirija primero a la Casa del Cosi. Hace un par de meses me presenté yo sólo en la finca para tomar unas cuantas fotos. El propietario creo que es Belga y no me entendía pero por señas me indicó que hablara con su mujer, que sí hablaba un poco español. Fueron muy amables al dejarme tomar fotos de los exteriores de la casa. En esta ocasión, como tampoco queremos molestar, directamente vamos a la fuente que está un poco más abajo de la casa y tomamos fotos del antiguo lavadero y de la balsa contigua. 

Bajando a la Fuente

Fuente del Cosi
Damos la vuelta y regresamos al camino de Benassait contemplando los bonitos paisajes de bancales y comentando anécdotas de como han ido cambiando las fincas en las que hay casas de labranza, con el tiempo. 
Bancales cultivados a la izquierda del camino
 Hoy en día no son accesibles los caminos de algunas de ellas ya que los propietarios parecen desconocer la obligación de dar servidumbre en los mismos.

Llegamos al camino de acceso que sube por el Barranc Diago y que está cerrado por una puerta metálica. Como no tiene candado la abrimos y pasamos a través de ella, pero teniendo la precaución de dejarla cerrada nuevamente tras nosotros.
Abriendo la puerta de acceso al Barranc Diago

Llegamos a la planicie en la que estaba la carbonera del Tio Fumat, justo en el punto en que se cruza el cortafuegos, o más bien, lo que queda de él ya que la cantidad de pinos que han crecido en su trazado no permite adivinarlo en muchos tramos.

Planicie en la que estaba la carbonera del Tio Fumat
Aspecto del cortafuegos
Descubrimos justo al lado de donde estamos los restos de una calera. Le explico a mi nieto David en que consistían las caleras mientras se come un bocadillo.

Montamos nuevamente en el coche y deshacemos el camino hasta la puerta de entrada al barranco. 
Regresando a la entrada del barranco
Seguimos bajando y tomamos el camino que a nuestra izquierda nos lleva a la Caseta del Caçadors. Hoy en día es una finca privada y de la antigua construcción no queda nada. Ahora hay un corral para ganado. Cuando llegamos vemos dos o tres perros atados, el coche del propietario en la puerta y también oímos a los animales dentro del corral. Doy algunos gritos buscando al pastor pero no aparece así que tomamos un par de fotos y nos marchamos.

Corral, antigua caseta de cazadores
Ahora queremos ir a la antigua Mineta de Ferro para tomar algunas fotos aparte de las que hice por mi cuenta ya que no se ven demasiado bien.  Enfilamos con el coche por un camino que nace paralelo al Barranc de les Vespres y que nos llevará a dicho lugar.

Camino de subida hacia la Mineta de Ferro

Cuando llegamos a la mina tomamos fotos desde arriba pero en el interior de la boca hay un barril de metal que tapona la entrada y que debieron dejarlo ahí cuando se habilitó el cortafuegos.
Ubicación de la entrada de la mina
Después de pensarlo un poco mi hijo se decide a descender para ver de mas cerca la entrada. Según nos cuenta, la tierra ha ido deslizando hasta taponar casi en su totalidad pero la abertura es suficiente para tomar alguna foto del interior.

Mi hijo David intentando llegar a la boca de la mina
Cogemos también alguna de los alrededores y nos montamos al coche para ir en dirección del Pas del Runal donde nuevamente bajamos para tomar fotos desde este punto.

Camino hacia el Runal
Pas del Runal
Seguimos por el camino que baja hacia les Casetes de Gil y que pasa muy cerca de la calera que mandó construir mi padre pero mi hijo dice que es mejor volver al pueblo ya, que la visitará en alguna de sus salidas de caza.


Por la ventanilla del coche nos entra un agradable olor a leña y a paella. Al pasar por la Caseta de Cañones vemos varios coches aparcados así que paramos en la puerta para saludarles.

Regresamos al pueblo y cuando estamos llegando Juani se acuerda que necesita fotos de los arcos y jardines del paseo del Plátano así que hacemos nuestra última parada.


Esperando en el aparcamiento próximo al Plátano

 Una vez termina, definitivamente nos vamos a casa donde nos espera un buen plato de gazpachos.





Salida para tomar fotos del 24 de abril de 2016



Nuevamente nos "echamos al monte" como dice la expresión, y esta vez voy más acompañado que nunca: Mis hijos David y Juani y mis nietos David y Aarón.

Nos montamos en el 4x4 y nos dirigimos a la Sierra de Fontanelles donde necesitamos tomar fotos, ya que el día que estuve por aquella zona con Juanjo Sanchís Torres tuve un pequeño accidente con la cámara y cuando llegué  a casa, en lugar de fotos me encontré con que había estado grabando vídeos, principalmente de nuestros pies. Gajes del oficio de aventurero.


Vamos en primer lugar al Barranc del Banyerut para fotografiar una calera que vimos en una anterior excursión y a la que en aquel momento no prestamos mucha atención.



Como esta vez ascendemos el barranco por un punto más bajo descubrimos el mortero de pólvora que yo recordaba de mi juventud, "el auténtico" porque en la anterior excursión encontramos unos calderones en la roca a los que tomamos por el mortero. Como nos parecen interesantes, haremos que ambas cosas formen parte de la ruta.

El mortero de polvora

Calderos de piedra
Nos llama la atención que a lo largo del cauce del barranco se ha excavado un canal no que nos hace pensar que en su día, el caudal de agua debía ser lo bastante abundante como para realizar una labor como esta.

cauce del barranco

Tomamos fotos de la calera que queda todavía un poco más arriba y regresamos al coche. Descansamos un momento para que los más hambrientos se coman el bocadillo.

Restos de calera próxima al mortero
De regreso al coche
Uno de los varios pinos que encontraremos en esta ruta
arrancados de raíz
Como parece que a mi nieto Aarón le empieza a gustar lo que estamos haciendo, le hemos dado una de las dos cámaras digitales que llevamos y entusiasmado con el tema, saca sus primeras fotografías.

Las primera fotos de Aarón
El resultado es bastante digno para tener casi 4 años. En cuanto a los vídeos, creo que se parece bastante a mí:


Bajamos con el coche por el mismo camino al Corral del Banyerut.

Dirigiéndonos al barranco que discurre al lado del Corral del Banyerut
 Esta vez tomaremos fotos de una calera que hay en el barranco próximo al corral y de una cavidad de la que desconocemos su uso pero que evidentemente está hecha por alguna persona, aunque los conejos se han encargado de adornarlas con varias madrigueras en su interior.

Calera próxima al corral

Cavidad excavada por el hombre y aprovechado
por los conejos para hacer sus madrigueras
Subimos un poco más arriba y tomamos fotos de un pequeño parat o presa que se construyó para desviar el agua del barranco y embalsarla, suponemos que con la finalidad de regar lo que en algún momento fueron claramente bancales de frutales.

Cazados por la cámara de Aarón

Restos del parat

Regresamos al coche, pero antes tomamos fotos del interior de la cueva que hay junto al corral.


Cueva próxima la corral del Banyerut

Nos dirigimos al nacimiento de agua de la Casa Marco. La subida es complicada incluso para un coche como el que estamos utilizando.

Subida hacia los nacimientos de la Casa Marco
Llegamos lo más próximo que podemos hasta el nacimiento. Aparcamos el coche justo al lado de un hoyo grande en el suelo hecha por jabalíes, para revolcarse en el barro.
Aaron observando los restos del barrizal
El minado antiguo ahora está seco pero con posterioridad se abrió un segundo minado próximo a él, que todavía suministra agua a la casa, ubicada bastante más abajo.Encontramos restos de las antiguas tuberías cerámicas hoy sustituidas por otras  de materiales más resistentes.

Restos de tubería

Subiendo al nacimiento
Conforme bajamos nos damos cuentas que hay bastantes hoyos circulares, esta vez hechos por el hombre, suponemos que para embalsar el agua que baja cuando las lluvias son abundantes.


Nos dirigimos ahora hacia el Barranc de Sanxet. En nuestro camino de bajada paramos para tomar fotos de una de las caleras que se conservan en mejor estado de nuestros montes.

Calera próxima al Barranc de Sanxet
Subida en paralelo al Barranc de Sanxet
Sobrepasamos con el coche las rocas en las que se practica escalada, que están llenas de escaladores en esos momentos. El día soleado y tranquilo invita a ello.

Zona de escalada
Tramo próximo a la cima
Cuando estamos llegando ya a la cima de la montaña aparcamos en la cuneta y nos dirigimos a pie por una senda que en su día fue camino de carros hasta llegar al collado de Marfullar bordeando el Barranc de Sanxet.


Primer tramo de la senda

Llegando al Collado de Marfullar
Collado de Marfullar
En este punto nos separamos, David y Aarón vuelven al coche mientras que el resto descendemos por el camino que discurre por el otro lado del barranco.
Pinos arrancados de raíz que vamos encontrando a lo largo del barranco



Tomamos fotos de las casas de labranza existentes, hoy en ruinas y del pozo que les suministraba agua.

Restos de la Caseta del Tio Ximo de Bañeres

Bajando por el Barranc de Sanxet
 Nos reencontramos en la pista forestal con mi hijo que nos espera ya con el coche.

Llegando al punto de encuentro
Bajamos ya de regreso a casa pero antes hacemos una última parada. Nos desviamos por un camino de carros donde las ramas de los pinos parecen que quieran impedirnos el paso, hasta llegar a la zona conocida como El Campamento, porque allí se organizaban campamentos de La Falange.

Camino de cruza la zona de El Campamento
 Allí quedan los restos de otra calera, como en el caso anterior, bastante bien conservada.

Restos de la calera

Nos reincorporamos a la carretera de Bañeres y regresamos a casa, donde nos espera un buen plato de comida.




Salida el 4 de junio de 2016


En esta salida vamos a tomar las fotos que nos quedan de algunas de las rutas de la Penya Tallà y alrededores.

Camino que se dirige hacia las canteras

El equipo A se pone nuevamente en marcha y nos dirigimos en primer lugar a la Casa les Gerres. De camino, a mitad de paso entre dos canteras hacemos una primera parada para tomar fotos de un refugio de canteros que todavía no teníamos. A pesar de que el techo se ha desplomado la construcción conserva su forma y la entrada.



Una vez ya en la casa tomamos fotos de los alrededores y descubrimos lo que parecen los restos de un antiguo refugio de canteros. Como el terreno se rellenó posteriormente a su alrededor, su aspecto es el de un pozo de nieve sin cúpula.




También fotografiamos el cabezo que hay enfrente y en el que había restos de asentamientos del Bronce.


Nos montamos nuevamente en el coche y esta vez nos dirigimos hacia las canteras de arcilla del Barranc de l'Infernya que en sus proximidades están las antiguas minas de plata. Al principio no tenemos claro si el coche podrá bajar la pendiente ya que en ese lugar el único camino aparente es el paso que los tractores medio han abierto en el lugar. Como vemos que el terreno parece firme, nos lanzamos con el coche para llegar hasta la base de las minas.

Comprobado el estado del terreno

Hace algunos años Juanjo Sanchis Torres publico en el libro de Fiestas (2012) un interesante artículo sobre estas minas.

http://apiarium-bellezainterior.blogspot.com.es/2012/06/las-minas-de-plata-de-biar.html


De camino a las minas de plata
Tomamos fotos de las tres entradas que encontramos en la parte más alta, aunque una de ellas está casi tapada por un montículo de piedras y arena. Aarón parece entusiasmado porque cree que dentro de estos túneles viven dinosaurios.





Tomamos la senda que se dirige en dirección hacia la Caseta de Tio Sixto para acceder a otros dos minados, esta vez de agua. 

Al mayor de ellos nos resulta totalmente imposible acceder debido a que han crecido en su entrada grandes rosales así que las fotos las tomamos desde los laterales. 


El último minado o mina nos resulta totalmente accesible.


También de los restos de un pozo próximo que aunque en apariencia parece actual porque la parte superior es de ladrillo, la parte más antigua es todavía visible en su interior. 



Buscamos el lugar en el que existió una pequeña balsa en la que yo me bañaba cuando era joven pero la única evidencia que queda son los restos de tubería de cerámica esparcidos por el lugar.


Nos montamos en el coche y como los accesos por la cantera de áridos están cortados al tráfico rodado, deshacemos todo el camino, pasando nuevamente por la Casa de les Gerres para reincorporarnos  a la carretera del puerto. 

Cauce del Barran de l'Infern, en el que hemos aparcado




Desde allí nos dirigimos por el camino auxiliar que discurre paralelo a la autovía para dirigirnos hacia la Coveta Roja. De camino tomamos infinidad de fotos: la vinyeta de la societat, els Pins de Don Juan, la Lloma la Palla y otros muchos más que aparecerán en distintas rutas. También las flores atraen nuestra atención ya que en esta época tejen una alfombra multicolor en la sierra. 


Cuando llegamos al camino de acceso a la cueva, como Aarón se nos ha quedado dormido y yo ya no estoy para ascender por el barranco, me quedo con él mientras el resto de exploradores de la familia se dirigen allí.



Como les lleva un buen rato da tiempo a que mi nieto se despierte y con cara de ansia, me diga" Tinc caca!

Como estoy ya un poco desconectado de estas cosas, me lo llevo a un rincón y le indico como debe hacerlo para no mancharse. Además, caigo en la cuenta de que no llevo ningún papel  para limpiarle así que recurro al medio más abundante en este lugar, las piedras, como cuando éramos pequeños. Parece que la experiencia no le ha gustado mucho pero al menos tampoco llora.

Cuando por fin regresan hacen unas últimas fotos de la fuente de la Coveta Roja, muy próxima ya al camino.



Con esto, damos por finalizada la ruta y hoy, como es sábado, cada uno se va a comer a su casa.





Salida del 7 de septiembre de 2016

Una vez pasado el verano, pero no el calor, nuevamente me echo al monte para seguir tomando fotos de diferentes rutas.

En esta ocasión salgo yo solo, cámara en mano. Como quiero fotografiar parte del Camí dels Castellans, desde la carretera a Villena, tomo la salida que hay a la altura de la fábrica de AISCAN. En este tramo tomo algunas fotos para luego continuar por la Cerámica de Conca.

Subida por la fábrica de Aiscan

Cruce con el Cami dels Barrancons

Subida por la cerámica Conca

Camí del Destallador

Una vez sobrepasado el Camí del Destallador y la Salseta y el chalet de Pedrito "Pistola", llego al camino que se adentra en la zona que conocemos como El Secanet

Caminos a la Casa del Frare y la del Secanet

En realidad son dos caminos los que nacen aquí, el de la izquierda, que está peor acondicionado para un coche, que llega hasta la Casa del Frare y el de la derecha asfaltado que entre otras casas, lleva a la antigua del Secanet

Interior de la casa del Secanet
Ésta está prácticamente en ruinas así que tomo algunas fotos de la misma y de su entorno y me monto en el coche pensando que este camino, más actual y en mejor estado, también debe comunicar con la Casa del Frare. Cuando llevo poco trecho sale de una de las propiedades una persona que, de muy malos modos, me indica que no puedo estar ahí por ser una propiedad privada. Aunque de buenas maneras intento explicarle mi confusión no atiende a razones y antes de que la cosa lleve a más, doy la vuelta y desciendo hasta el comienzo del antiguo camino. 

Subida a la Casa del Frare
Afortunadamente, tengo mucha más suerte en la otra casa. Su propietaria actual, hermana de Josele Olcina Pastor, quien fue amigo mío y compañero de caza, y que nos dejó hace muy poco, no sólo me atiende con amabilidad sino que me de carta blanca para recorrer la finca y tomar todas las fotos que necesite. 

Casa del Frare
Conforme lo hago descubro rincones que no había conocido en mi juventud cuando les llevaba los carros de leña. También asocio otros con las historias que me ha contado en ocasiones mi prima Milagros Pérez Galvañ, ya que durante su infancia vivió en esta finca cuando mi tío Quico trabajó de mulero en ella. Por ejemplo, la balsa pequeña que era utilizada como lavadero por las mujeres de la casa.
Balsa-lavadero
Disfruto enormemente de esta visita y cuando ya he tomado un buen número de fotos me dirijo nuevamente al Camí dels Castellans en dirección al Figueral.

Cuando llego a la rotonda cojo el camino que se dirige hacia la casa de les Foietes, mas o menos por donde tiene el chalet Miguel "Johnson" hijo y están los restos del Corral del Figueral. Cerca del parat del les foites están los restos de la antigua balsa del Figueral, cuyas aguas eran conducidas para dar servicio tanto a la Casa del Frare como la de El Secanet.

Antiguo corral del Figueral
Bassa del Figueral

Después de tomar fotos del los lugares mencionados, regreso a casa satisfecho a pesar del encontronazo.

Salida a tomar fotos del 2 de abril



Hoy domingo, después de mucho tiempo, he vuelto a salir con mis hijos para hacer algunas fotos que necesitamos. Visitaremos lugares en los que ya estuvimos pero de los que queremos tener algunas más.
Nos dirigimos en primer lugar hacia l'Alt de les Voltes y el Cantal d'Arnau por la pista forestal de la Serra del Frare


Cuando pasamos vemos a las cuadrillas que van a preparar bajo el Pico el Frare las hogueras del 10 de mayo. Como están posando para la foto de recuerdo decidimos no parar y hacerlo a la bajada.

Conforme iniciamos el ascenso por l'Alt de les Voltes en dirección al cantal comprobamos que el camino, después de la gran nevada y las lluvias, está en un estado lamentable e incluso con el el 4x4 no es fácil subir. 


Dos ramas de dos pinos diferentes han cedido por el peso de la nieve y justo están descolgadas en medio del camino que debemos pasar. Pero esto tampoco nos detiene. Aparcamos en el espacio que queda entre los dos picos de macizo ya que aquí es precisamente donde esta el Cantal d'Arnau



Juani sigue a pie para recorrer todo el macizo montañoso en dirección hacia las canteras y La Forca para tomar fotos de esa parte. Mientras tanto, David y yo bajamos a la cueva o abrigo rocoso que queda bajo el Cantal y en la que me refugié siendo niño en una ocasión que salí en busca de caracoles y me pilló una buena tromba de agua por aquí. Encontramos los restos de algún senderista pero bien antiguos: una lata oxidada de sardinas de las que se abrían con llave. Como le hace gracia, la cogemos y nos la llevamos de recuerdo.


Cuando nos reunimos otra vez los tres nos montamos nuevamente en el coche y regresamos al pueblo en dirección al puerto. 



Antes paramos para saludar a la cuadrilla que ahora está en el borde del camino y en la que podemos saludar tanto a mi amigo Juanjo, como a mi cuñado Tàbol y a Elisa, la mujer de mi sobrino Silvio.

Una vez en el puerto nos metemos por el camino de la Forca con la intención de llegar al Corral de Les Foietes, para ir tomando fotos sobre la marcha. Cuando ya estamos bien cerca nos damos cuenta que el coche es demasiado ancho para seguir por este tramo. 



Como ya tenemos fotos de otros días, damos la vuelta y regresamos al puerto para cruzar la carretera y seguir por el Camí de Fontalbres.

El chabolet, pequeño refugio construido por mi cuñado Lluc cuando cultivaba estos terrenos y que todavía se mantiene en pie junto al camino de la Forca
Una vez sobrepasamos la Casa de Bobo, paramos a mano derecha para enseñarles un nuevo pozo de nieve que conozco.


Alguien le habló de él a Juanjo Torres quien a su vez me explicó como localizarlo. Su tamaño es mucho mayor que el del otro pozo que hay en esta misma finca, cerca del collado. Como en el caso de éste, la cúpula ya no existe. 





Tampoco hay apenas restos de las piedras secas que formaban su estructura pero todavía se puede apreciar la forma cilíndrica completa y su diámetro no debe ser mucho más pequeño que el del pozo de nieve del camino de la Virgen.




Seguimos en dirección a la Font del Xorro para ver las dos pequeñas cuevas que allí hay. También para comprobar como está el caudal del agua después de las lluvias.


Seguimos en dirección a la Font del Xorro y al llegar a la Fonteta de Soriano nos damos cuenta que el agua desborda el pequeño canal de bajada y en lugar de llegar a la pequeña balsa por el conducto subterráneo lo hace por la superficie. Intentamos desatascarla pero el problema es que la tubería no está bien colocada y desvía el curso del agua.



Por fin llegamos a la fuente. Mientras ellos bajan a tomar fotos, yo me entretengo hablando con una familia que está visitando el lugar, entre los que hay  un octogenario como yo. 


Techo del abrigo rocoso que hay cerca del pequeño acueducto
Cuando se marchan compruebo que David se ha introducido por el orificio de la pequeña cueva que queda a mayor altura ya que según nos cuenta, la galería es estrecha pero larga y que parce que comunica con otro al fondo. 


Cuando está ya alcanzando la zona más profunda, al encender el flash del móvil una bandada de mosquitos desde el interior se lanza contra él y le obligan a salir nuevamente al exterior.



Toman después algunas fotos y vídeo del canal del agua y del pequeño acueducto que se prolonga por la zona rocosa.
 



Nuevamente nos montamos al coche ya para regresar a casa, que ya va siendo hora.